Sandra Barneda es actualmente una de las mujeres lesbianas más influyentes de nuestro país. La presentadora es un icono de la visibilidad lésbica en la televisión. Durante 6 años mantuvo una relación amorosa con otra compañera del mundo del espectáculo, Nagore Robles, amor que eligieron visibilizar en sus redes sociales, generando así un impacto muy positivo en la sociedad, algo por lo que siempre estaremos muy agradecidas.
Pero Sandra no lo tuvo fácil. El inicio de su carrera estuvo marcado por la lesbofobia en el ámbito laboral, tal como lo contó en el podcast de Vanitatis, “La mala reputación”.
La presentadora de La isla de las tentaciones recuerda la experiencia como “una cabronada”.
“Recuerdo que en Telemadrid me encerraron en un despacho y me preguntaron directamente si me gustaban las mujeres. Yo me quedé… Sudaba por dentro. En ese momento eran otros tiempos, estamos hablando de 2003, el matrimonio igualitario aún no estaba aprobado ni mucho menos”, comenta. “Me preguntaron cosas que no se me debían preguntar quizás porque era una mujer guapa y no entraba en el canon de lo que se considera lesbiana“.
Sandra no quiso responder, preguntó “¿y quién lo dice”, y cuando su jefe le contestó quiénes iban hablando de su lesbianismo, la presentadora prefirió el humor como arma de contraataque y le dijo: “Pues si te digo lo que dicen de ti”.
En el podcast Sandra habla de su propia visibilidad. “Yo no me avergüenzo de ser quién soy. Siempre he sido coherente. Nunca me he inventado un novio, nunca he creído que estuviese haciendo nada malo. Durante un tiempo estuve con la sensación de vivir con un subtítulo: ‘Sandra, lesbiana‘”.
Actualmente Sandra tiene una relación con una bailarina y empresaria de Países Bajos, Pascalle Paerele, de 33 años, divorciada y madre de una niña. Recientemente, tras cumplir un año y medio juntas, Sandra hizo pública la relación en sus redes sociales.