¿Te has preguntado alguna vez si realmente eres feliz en tu relación o simplemente te has acostumbrado a ella? En un mundo que nos bombardea con la idea de que estar en pareja es la meta, muchas veces terminamos atrapadas en relaciones que no nos llenan, pero que nos dan cierta estabilidad, aunque sea emocionalmente cuestionable.
A veces tendemos a elegir pareja como en un buffete libre. Nos quedamos con una opción de las que tenemos en frente. ¿Pero es lo que realmente deseamos? ¿Cómo sería nuestra pareja ideal a nivel emocional, mental y sexual, aunque no esté en el buffet?
Es fácil conformarse. Nos enseñaron que el amor implica sacrificio, paciencia y aguantar algunos vacíos emocionales porque “nadie es perfecta”. Así que ahí estamos, en relaciones donde no nos sentimos plenamente vistas, valoradas o correspondidas, pero nos quedamos porque el miedo a la soledad pesa más. Porque la dependencia emocional nos hace creer que estar con alguien, aunque no sea ideal, es mejor que estar solas. O porque el pánico a “no encontrar nada mejor” nos paraliza.
Pero, ¿y si en lugar de conformarnos, apostáramos por la soltería consciente y elegida? No como un estado de espera hasta que llegue alguien “a la altura”, sino como una decisión de bienestar, de amor propio, de darnos la oportunidad de disfrutar nuestra vida sin concesiones.
La soltería elegida no es sinónimo de fracaso, ni de tristeza, ni de resignación. Es libertad, es exploración personal, es tiempo de crecimiento. Es no llenar huecos con alguien que no nos aporta, sino con experiencias que nos nutren. Es saber que si en algún momento llega alguien que realmente nos haga vibrar, será por elección y no por necesidad.
Tips para reflexionar y tomar decisiones
Si tienes dudas sobre tu relación o tu soltería, aquí algunos puntos para reflexionar:
- ¿Te sientes plenamente feliz y valorada en tu relación? Si la respuesta es no, es momento de analizar por qué sigues ahí.
- ¿Estás con tu pareja por amor o por miedo a la soledad? Ser honesta contigo misma te ayudará a tomar la mejor decisión.
- ¿Sientes que has cambiado para adaptarte a la relación en lugar de crecer dentro de ella? La pareja correcta potencia quién eres, no te limita.
- ¿Tu pareja respeta tus tiempos, espacio y proyectos personales? Si sientes que pierdes autonomía, es momento de replantearlo.
- Si estuvieras soltera, ¿estarías más tranquila o más angustiada? Imagina ambos escenarios y observa qué emociones despiertan en ti.
Así que, si sientes que en tu relación actual hay más conformismo que amor real, pregúntate: ¿merece la pena? Y si estás soltera porque nadie ha estado a la altura de lo que buscas, celébralo. No hay nada más revolucionario que elegirte a ti misma.
