Habla por primera vez de su homosexualidad
Susi Sanchez es una actriz todoterreno que a sus 64 años está tan guapa como 30 años atrás. Nos fascinó en Cuando deje de llover y ahora sigue en los escenarios con Los hijos, pero también en el nuevo mundo de las series online con Días de Navidad, y cómo no, en cines, junto a Marta Etura, en Legado en los huesos.
Pareja de Consuelo Trujillo durante muchos años, con la que, desde el pasado año existe actualmente una gran amistad, Susi ha hablado por primera vez para Mujer Hoy, sobre lo que ha sido ser abiertamente lesbiana en un mundo donde lo normal es finjir ser heterosexual para no perder papeles o por imperativo de tus representantes, sobretodo si están en plena dictadura.
Ha sido la eterna secundaria muchas veces, pero nunca ha pasado desapercibida, llegando a ser Chica Almodóvar, pero también musa de Ramón Salazar o Vicente Aranda.
Susi le ha contado a la revista de actualidad que en su época no era raro que un director decidiera contar o no contigo queriendo tener primero un encuentro sexual. En palabras claras, abuso sexual. Había quienes pasaban por el aro, considerándolo un camino ineludible, pero ella dejaba claro que era lesbiana y que tenía intención alguna de acceder a eso. Entonces, según Susi, dejaban de llamar. “Eso lo he vivido. Y no me importa en absoluto: porque si esa era su medida del trabajo, no me interesa lo más mínimo trabajar con personas así. Eso lo tengo clarísimo”.
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Sobre su infancia como lesbiana en país, España, donde la homosexualidad no se despenalizó hasta la muerte del dictador, Susi cuenta que vivió su despertar sexual, en la adolescencia, atemorizada. Lo habló en casa, con su madre, años más tarde, quien le pidió que no se lo dijera a su padre y que no saliera en la televisión hablando de ello. (Murió hace cuatro años). Independientemente de todo “yo he vivido el amor siempre con mucha libertad, la verdad. Y con mucho sufrimiento también, porque cuando eres muy joven apenas sabes amar. Y sufres. Bueno, igual de mayor también sufres. [Risas] La vida en el fondo es un aprendizaje para esto: para amar (…) las parejas que he tenido siempre han partido de una amistad previa… No han sido cosa de flechazos. Creo que las mujeres, efectivamente, nos enamoramos de otra manera. Nosotras, al menos en mi época, nos acercábamos poco a poco. No te ibas con la primera que llegaba. El concepto de aquí te pillo, aquí te mato es más reciente, más de las generaciones educadas en libertad… aunque yo lo viví siempre con bastante normalidad.
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