Orgullo olímpico

Ayer se apagaba el pebetero. Las Olimpiadas mas gayfriendly de la historia han llegado a su fin y desde Mirales queremos hacer nuestro particular balance de los Juegos.

A lo largo de la competición nos hemos mostrado orgullosas de nuestras deportistas, ellas han sido las grandes protagonistas. En el equipo español han sido 9 de las 17 medallas conseguidas las que se han colgado mujeres. Pero nuestra lucha no es esa, si hemos obtenido más o menos medallas que los hombres. Simplemente queríamos aprovechar la competición para reivindicar el papel de la mujer en el deporte. Desde aquí no sólo queremos dar la enhorabuena a esas guerreras sino a todos y cada uno de los atletas. Por ofrecernos 21 días de deporte con el esfuerzo y las alegrías que conlleva, pero sobretodo por transmitir un ambiente de multiculturalidad, de diversidad y de tolerancia.

La fiesta del deporte se inauguraba en Rio, y era en la misma ceremonia de inauguración en la que nos encontrábamos con los primeros gestos a favor de la tolerancia. Lea T, la modelo transexual fue la abanderada de Brasil. Con ella fueron cinco los transexuales que por primera vez en la historia de los Juegos portaban el nombre de las delegaciones olímpicas en el desfile inaugural.

Se abría la puerta a la tolerancia, puerta que cruzaba más de una deportista para participar en la lucha por la igualdad y la visibilidad en el deporte. Es más que de sobra conocida por todas la primera petición pública de matrimonio que protagonizaron Marjorie Enya e Isadora Cerullo. La imagen dio la vuelta al mundo, Enya voluntaria en Rio, se armaba de valor y en plena entrega de medallas de la final de rugby le pedía a Isadora que se casara con ella. Las emotivas lágrimas de la jugadora brasileña de rugby daban por supuesto el sí quiero.

El amor estaba en el aire, y las medallas en juego. Muchas eran las deportistas que participaban en Rio con la tranquilidad de disfrutar de su condición, son ellas, las valientes que nos representan. Es a las que se atreven en este mundo del deporte, el que carece todavía de un pleno en tolerancia y visibilidad, es a las que dan el paso de decir “soy lesbiana” o “soy bisexual”, es a ellas a las que queremos dar el protagonismo en el que es el último artículo de estas magníficas Olimpiadas de Rio de Janeiro.

Cinco oros, cuatro platas y dos bronces, son un total de 11 medallas las que se han colgado con orgullo algunas de las deportistas abiertamente lesbianas de estos Juegos Olímpicos. A todas ellas, gracias por participar en la lucha por la igualdad, la tolerancia y la visibilidad, y por hacerlo en un escenario tan amplio. En Mirales queremos haceros un pequeño homenaje.

Son lesbianas de oro:

Rafaela Silva, brasileña, campeona en Judo en la categoría de -57 kg. “Muchos me criticaron y dijeron que era una vergüenza para mi país. Ahora soy campeona olímpica”