Es la artista Pop número 1 en el Reino Unido. El 23 de Octubre editó en españa su primer álbum “Y cry when I laugh”. Este ha sido el año del ascenso meteórico de Jess Glynne. ¿No la identificas por su nombre? Escúchala, seguro que la reconoces.
Jess Glynne afirma sentirse emocionada con el absoluto éxito de su música, pero también celebra, como afirmaba en septiembre a Shangay, que no la reconozcan todavía por su cara, sino por su voz.
Admiradora de Whitney Houston y Aretha Franklin desde pequeña, Jess ha logrado cumplir su sueño de dedicarse a la música con un disco que, como explicaba a The Daily Star Sunday recientemente, esta inspirado en la dolorosa ruptura de su relación con su ex (novia). Respecto a si es una cosa u otra, la cantante sentencia que huye de etiquetas y asegura: “Quiero poner todas las cartas sobre la mesa con este disco. Y lo último que haría es mentir. Si mi última relación ha sido una mujer ¿para qué hacer como si fuera un hombre? De mis discos favoritos, Back to Black, de Amy Winehouse, The Miseducation of Lauryn Hill y 21 de Adele (buen gusto tiene la chica), sé las historias que hay tras ellos, y eso es muy importante para mi. Porque cuando prestas atención a las letras comprendes realmente su significado. En una entrevista, el periodista se refería todo el rato al hombre que había inspirado este disco. Y le corregí, le dije que se estaba equivocando, que había estado saliendo con una mujer”.
Jess Glynne afirmaba recientemente que las artistas femeninas lo tienen más difícil que los hombres, “nos exigen mucho mas esfuerzo para triunfar”. Ella lo sabe bien, pues comenzó a trabajar en una oficina de Management y fue ahí donde descubrió que lo suyo no era ser manager de nadie sino ser artista. Viendo cómo se gestionaba la carrera de los demás, aprendió que quería, y sobretodo qué no quería, de su propia andadura. Y aquí esta ella, con su propia identidad, su propio estilo, y pisando
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