Elena de Céspedes fue también la primera cirujana española
Nosotras mismas hemos asegurado que Elisa y Marcela, las profesoras gallegas, fueron el primer matrimonio lésbico de la historia.
Con esa entradilla la propia Isabel Coixet presentó su película sobre ellas (puedes ver Elisa y Marcela aquí). Pero posiblemente no fue así, o no del todo. Las gallegas se casaron en 1901, momento en que iniciaron una trepidante historia de amor, con huida de España e hijo incluido.
Pero el primer matrimonio lésbico posiblemente lo protagonizó una de las figuras lésbicas, o transexuales, -nunca lo sabremos-, más importantes de nuestra historia, Elena (o Eleno) de Céspedes, reconocida como la primera mujer cirujana. Eleno -Elena travestida de hombre- y María se casarían en Toledo en 1586, y si no es considerado con seguridad el primer matrimonio lésbico es porque a día de hoy no podemos aclarar si Eleno era lesbiana, transexual o hermafrodita.
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Los orígenes de Elena son tremendamente misteriosos. Se sabe de ella que llevaba en el pecho la señal que le hacían a los esclavos con hierro ardiendo, que tenía un origen morisco y que fue bautizada al nacer -posiblemente para evitar la Inquisición-.
Fue obligada a casarse a los 16 años, como cualquier mujer de la época, pero el matrimonio ni siquiera sobrevivió al primer embarazo. El divorcio no existía pero algo pasó que acabó con un marido huyendo a Jaén. Ella se fue a trabajar sirviendo a una casa acomoda en Sevilla y a los 19 dejó allí a su hija, confiando en que tendría un futuro mejor, y se marchó. Cambió su identidad por la de Eleno. Eleno de Céspedes.
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Recordemos que en esa época ser mujer era prácticamente no ser nada. Y si eras hombre tenías la libertad de hacer lo que querías, por eso era frecuente que muchas mujeres se vistieran de hombre y adoptaran una identidad masculina.
En Sanlúcar de Barrameda trabajó de sastre en casa de un mercader y enamoró a su mujer, siendo esta la primera relación lésbica conocida de nuestra protagonista. Después vinieron numerosas relaciones con varias mujeres entre Sevilla y Cádiz, mientra trabajaba en la labranza, la sastrería y la compraventa de ganado. Acabó combatiendo como militar para Don Juan de Austria contra los propios moriscos de los que provenía y a los que consiguieron definitvamente echar de la península en aquellos tiempos.
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Ganar la Guerra de las Alpujarras le permitió montar una sastrería, ascender en la “escala social” y acceder al oficio que siempre había deseado hacer, la medicina, convirtiéndose en la primera mujer en la Historia en obtener un titulo de medicina -siglos antes de las siguientes- y en ser cirujana.
Comenzó a trabajar como cirujano en la corte del Rey Felipe II y se enamoró de Isabel Ortiz, viuda y madre de dos niños. Pero no sería su amor definitivo. María del Caño, la hija mayor de la familia en donde entonces Eleno empezó a residir, cayó locamente enamorada de Eleno, que pidió la mano a sus padres y se la llevó a Madrid a casarse.
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Primer problema: El vicario no quiso concertar esa unión. Alegó sospechas porque que no tenía barba y, o era una mujer, o estaba castrado. Eleno trajo un informe de unos cirujanos -¿amigos?- que certificaban que tenía órganos masculinos. Algunos historiadores presentes plantean que podría haber sido hermafrodita, pero aquellos informes médicos negaban la existencia de cualquier órgano femenino, por lo que imaginamos que fueron falsificados. María y Eleno consiguieron casarse y tuvieron un feliz matrimonio que duró 14 meses.
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Segundo problema: Un antiguo compañero de la guerra comenzó a extender rumores sobre ella. Que si nunca se había bañado con ellos durante el servicio, que si tenía cuerpo de mujer… No hubo manera de evitarlo esta vez, Eleno se encontró con la Inquisición. Era 1587, y le acusaban de herejía y pacto tácito con el diablo. Tras un juicio muy bien documentado y tremendamente largo, le perdonaron la vida pero le sentenciaron a vestir de nuevo de mujer. Volvía a ser oficialmente Elena, y el matrimonio quedaba cancelado. Tras la sentencia, desgraciadamente se les perdió la pista a María y a ella.
Una historia increíble que sorprendentemente pocos conocen. La historia de la primer mujer cirujana de la historia, la primer mujer médica y el primer matrimonio lésbico documentado.
(Imagen portada: Simeon Solomon).