Adrianna Vorderbruggen fue una de las primeras mujeres lesbianas que salió del armario en 2012, cuando las Fuerzas Armadas de Estados Unidos derogaron el Don’t Ask Don’t Tell, nombre con el que se conocía la práctica que invisibilizaba a las personas LGTB en el ejército.
Adrianna fue una de las primeras en casarse, defendía la visibilidad y los derechos LGTB. Es la primera mujer homosexual asesinada en acción. El culpable ha sido un atacante suicida que además asesinó a otros 5 soldados. Adrianna, miembro de la Fuerza Aérea, estaba casada con Heather Lamb y ambas eran madres del pequeño Jacob.
“Nuestro consuelo es que sabemos que ella quería estar allí, que ella creía y amaba su trabajo, que estaba haciendo un trabajo importante a favor de los afganos y nuestra nación”, dijo su esposa a NBC News. “Siempre ha sido mi heroína, nunca tanto como ahora.”
Las asociaciones de familias LGTB emitieron un comunicado sobre la muerte de Adrianna: “Hoy se cumplen cinco años desde que se derogó el ‘Don’t Ask Don’t Tell’, honramos el aniversario con los corazones sombríos y sabiendo que familias como las de Adrianna Vorderbrüggen ya no sirven en las sombras. Nuestro consuelo es el hecho de que su familia tiene los mismos derechos y protecciones que las de cualquier familia de militares estadounidenses”.
En 2013 la madre de Heather participó en un proyecto que recopilaba historias de vida del colectivo LGTB. Ella escribió:
“Mi hija está casada con una oficial de la Fuerza Aérea. Hace dos años, cuando Heather estaba dando a luz a mi nieto, su esposa (entonces su pareja) tuvo que mentir en la solicitud de licencia para ayudar a “una amiga” que estaba teniendo un bebé. Adrianna no podía compartir su alegría, porque si lo hubiera hecho su carrera podría haber sido destruida”