Patti Sue Mathis tenía 23 años cuando se suicidó. Era lesbiana, e intentó luchar contra eso, porque no recibió apoyo ni siquiera de su familia. Cuando les contó que le gustaban las chicas, ellos la rechazaron.
Nathan se volvió alcohólico, no podía perdonarse el suicidio de su hija. Pero de la autodestrucción pasó a algo más provechoso, se volvió defensor de los derechos LGTB.
El año pasado Nathan se hizo conocido cuando los periodistas encontraron a este granjero con un cartel con el que se manifestaba en contra de la candidatura al senado del juez Roy Moore, y lo entrevistaron. “El juez Roy Moore llamó a mi hija Patti Sue Mathis una pervertida porque era homosexual. Roy Moore, de 32 años, salió con chicas adolescentes de 14 a 17 años. Eso lo convierte en un pervertido del peor tipo. Por favor, no votes por Roy Moore “, podía leerse en su cartel.
Moore era tan homófobo que se sabía que en su carrera como juez había perjudicado a personas LGTB, como a una madre lesbiana a la que le quitó la custodia de sus hijos solo por su homosexualidad.
La imagen de este padre se volvió viral, hasta tal punto que Ellen DeGeneres lo invitó a su programa de televisión.
Este padre consiguió que un lago artificial del sur de Alabama lleve el nombre de su hija. Hermosa manera de recordarla. Ahora que Estados Unidos ve peligrar sus derechos en materia de diversidad sexual con el gobierno de Trump, nos encanta daros a conocer historias como ésta, donde el dolor y la culpa pueden llegar a transformarse en amor infinito.
Si quieres conocer más de la historia de este padre, te recomendamos este artículo de BuzzFeedNews, además de este vídeo: