Las lesbianas llevamos tantos años siendo invisibles que ahora lo damos todo por la visibilidad. Por eso nos encanta la iniciativa de Libros Lésbicos, que además de ser una editorial especializada en el colectivo, ha lanzado Noveles, una antología de literatura LGTB para dar a conocer nuevos talentos literarios.
Aquí puedes leer Noveles 1 y si tienes ganas de participar en el segundo libro, aún estás a tiempo de enviar tu escrito a Noveles 2.
Hemos hablado con las escritoras que han participado en Noveles 1 y todas nos han contado sobre su compromiso con la visibilidad lésbica en la literatura. “Porque leyendo todos los relatos me reafirmo en la idea de que es importante escribir y expresar los sentimientos que nos son comunes a todos nosotros, ya que de la manera que me han ayudado a mi al leerlos identificándome con muchos momentos de mi vida espero que así sea con las personas que lean esto”, nos cuenta Elena.
Por su parte Gema Castillo pone el acento en lo que la literatura lésbica significa para cada lesbiana. “La literatura LGBT ha representado para mí un medio seguro de comprender mejor emociones y situaciones, propias e inclusive de otras personas. Un refugio en el cual es posible aprender, expresar ideas y hasta divertirme. Por ello, decidí participar en la publicación Noveles, con la esperanza de contribuir de alguna forma a la causa”.
En esta línea Patricia afirma: “creo que como consecuencia de haber sido relegada a un segundo plano e incluso, escondida, la literatura LGTBQ+, la falta de su existencia, en muchas épocas de la historia, ha dejado a generaciones del colectivo perdidas, normalmente uno siempre tiende a encontrarse cuando se identifica con algún verso, personaje o historia. Este tipo de escritos pueden llegar a normalizar la presencia en nuestra vida cotidiana de diversas historias de amor, deseo, desamor, desengaño, sin importar el sexo de sus protagonistas”.
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Marta Garrido también piensa en los más jóvenes. “Me parece un factor clave para ayudar sobre todo a las nuevas generaciones, es importante hacerles ver que no están solos, fomentar el camino hacía la normalización de un sentimiento que debería serlo de por sí, el amor es amor tenga la forma la que tenga y todo el mundo debería tener el derecho de vivirlo en luz”.
“La visibilidad de la literatura LGTB da cabida a un amplio contenido para acompañar el avance por la igualdad de los derechos. Un síntoma de progreso en la sociedad, es su patrimonio cultural y a través de la lectura se aprende y se refleja una sociedad heterogénea. La literatura LGTB es una de las herramientas para normalizar a las personas con otra orientación sexual”, afirma Tania Sánchez, otra de las escritoras seleccionadas en Noveles 1.
Cualquier persona puede participar en Noveles, así nos cuenta Mirna Ortega. “Cuando vi la convocatoria quise participar porque desde que era más joven me gustaba escribir historias, pero solo quedaban ahí, en un cuaderno olvidado por el tiempo. Después con el paso de los años me di cuenta de mis preferencias sexuales y la temática de lo que escribía cambió. Yo no soy escritora, solo escribo por hobbie porque es algo que me gusta hacer. Y hace algunos años empecé a escribir historias lésbicas siempre inspirada en mis vivencias y en mujeres que iba conociendo. La convocatoria me alegró mucho porque pensé que era una gran oportunidad para dar a conocer mis historias, pensé que tal vez no me escogerían pues imaginaba que mucha gente que tenía más experiencia o que se dedicaba a esto saldría seleccionada. Pero cuando vi el resultado me emocioné porque por fin había encontrado a alguien que le gustaba lo que yo escribía”.
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Para Cris fue un primer paso para sus planes de futuro. “Me habló de la convocatoria mi psicóloga, ella sabia que escribía y que mi intención en un futuro es autopublicar algo, me gustó la iniciativa y después de mucho pensarlo decidí que era una buena forma de dar a conocer mis escritos”.
Noveles 1 reúne letras de varios países. “Por un lado, me llevó a participar la curiosidad de saber si podría o no ganarla por ser una convocatoria española (en Colombia he ganado algunas). Por otro lado, me interesó que el tema fuera tan puntual, es decir, textos lésbicos, que me parece que se necesitan muchísimos más ahí afuera al alcance de quien lo quiera”, dice Ana Lucía Pérez.
Los malos momentos vitales también han sido detonantes para algunas participantes, como es el caso de Carmen Martín. “Lo que me llevó a participar en el concurso fue, que yo estaba pasando por un momento de desamor y quería publicar lo que en otros momentos había sentido. Tenía la necesidad de compartir mis sentimientos. Es importante este tipo de literatura para que quien lea lo q escribimos se sienta de alguna forma reforzado y apoyado en sus sentimientos y emociones”.