Sé que es difícil para ti entender que me sienta atraída sentimentalmente por una mujer. No puedo explicármelo a mí misma. Pero son cosas que ocurren. Lo siento por engañarte y hacerte pensar que sólo mantenía una relación lésbica porque no había hombres buenos y adecuados para mí en Hong Kong. Hay muchos hombres buenos. Pero, simplemente no son para mí. Lamento que no tengas idea de lo feliz y satisfecha que estoy con mi vida, y que haya aspectos de ella que no compartas.
De esta forma, Gigi Chao, la heredera de una gran corporación de Hong Kong, compartía una carta con su padre y con el mundo.
Recordaréis que, hace unos años, un señor intentó “subastar” a su hija lesbiana. Lanzó una primera oferta por casi 60 millones de dólares americanos y luego la dobló, llegando a ofrecer casi 130 millones al hombre que consiguiese que su querida hija se volviese heterosexual (como si se pudiera). Pues este señor fue Cecil Chao, padre de Gigi, quien no solo consiguió ser conocida mundialmente sino que, además, es una de las lesbianas más influyentes del mundo.
Pues bien, Gigi Chao no solo no se enfadó con su padre sino que entendió que lo hacía por su bien aunque no estuviese a favor de su curiosa forma de encontrarle un marido. Además, esto le ha permitido poder ser un referente activista LGTB en un país en donde hasta 1991 no fue despenalizada la homosexualidad. 
Ella y su mujer Sean Eav, unidas civilmente en Francia en 2012, se ha hecho visibles, han trabajado con las Naciones Unidas para luchar por los derechos de la comunidad LGTB y ayudó a fundar la organización Big Love Alliance, que busca promover la igualdad en Hong Kong, que el próximo 2022 se convertirá en la sede de los ‘Gay Olimpics‘
A día de hoy, es Gigi quien dirige la empresa familiar después de que su padre entendiese que es ella la que decide su vida y eligiese hacerla heredera legítima de la Compañía.
