La ley LGTBI, aprobada esta semana por el gobierno de España tiene mucho contenido que te incumbe. A partir de este texto, las lesbianas y bisexuales hemos recuperado un derecho perdido años atrás, el de acceder a la reproducción asistida por la Seguridad Social, algo que no todas las comunidades estaban respetando.
También esta ley trae otra buena noticia: podremos filiar a nuestros hijos sin boda mediante, tal cual hacen las parejas heterosexuales. Este punto era uno de los que más se ha luchado los últimos años por la injusticia que representa que una pareja heterosexual pueda inscribir a sus hijos en el Registro Civil sin que nadie le pida al padre una prueba de paternidad, y que nosotras solo pudiéramos hacerlo estando casadas.
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Además, la ley se asegura que en los contenidos educativos a nivel nacional se aborde la diversidad humana y la tolerancia de la diferencia, algo totalmente revolucionario en nuestro país.
Te contamos punto por punto:
Técnicas de reproducción asistida.
Las mujeres lesbianas, bisexuales, las personas trans con capacidad de gestar y aquellas sin pareja tendrán acceso a técnicas de reproducción asistida dentro de la Seguridad Social, una opción de la que carecíamos desde hace siete años, a pesar de que en varias comunidades autónomas se hacía.
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Filiación de los bebés nacidos de mujeres no casadas.
Para que la pareja de la madre biológica pueda figurar como progenitora del bebé ya no tendrá que adoptarlo en caso de que no quiera casarse, bastará como identificarse como otra madre en el registro al momento de registrar a la criatura. La ley implica la modificación del artículo 120 del Código Civil.
Diversidad LGTBI en las escuelas.
El Gobierno, previa consulta con las comunidades autónomas, incluirá “contenidos relativos al tratamiento de la diversidad sexo-afectiva y familiar de las personas LGTBI” en los temarios de ingreso, acceso y adquisición de los cuerpos docentes. Se fomentará también la visibilidad de referente positivos LGTB en los libros escolares. Se promoverán programas de educación sexual y reproductiva y de prevención de E.T.S.
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La ley ha sido objeto de polémica fuera y dentro del gobierno por el epígrafe específico dirigido al colectivo transexual. Para el PSOE, el requisito de un testigo y una evaluación psicológica de la persona antes de la reasignación legal de sexo era algo rescatable y positivo de la ley anterior. Para Podemos, el requisito único debía ser la voluntad del sujeto. Parece que la balanza ha girado a favor de la ministra de igualdad Irene Montero.
Celebramos todos los avances que las mujeres lesbianas podremos disfrutar gracias a la Ley LGTB, y agradecemos toda la lucha activista que ha permitido conseguirla.