¿Quién nos ha tenido una profesora de la que se ha enamorado platónicamente? Yo algunas en el colegio y otras varias en la universidad. Por eso esta historia es para todas nuestras niñas lesbianas internas.
Monica Ketchum tiene 32 años, y hace 16 estaba deslumbrada con su profesora de Ciencias, Michelle Foster, que hoy tiene 57 años.
En plena pandemia por el COVID, cuando pasábamos muchas horas encerradas en casa repasando nuestra vida, Mónica decidió buscar por redes sociales a Michelle. La profesora se alegró. ¡Su antigua alumna! Y anda, su antigua estudiante era lesbiana como ella. Y como ya sabéis, el lesbianismo une muchísimo…
Comenzaron a hablar todos los días hasta que un día decidieron quedar a comer. “Nos sentamos a almorzar durante 5 horas, fue estupendo ponernos al día. Nos hicimos muy amigas, podíamos hablar de cualquier cosa”, contó Mónica al Mirror.
Ese lazo que las unió llegó en un momento preciso. “Nos sentamos a almorzar durante 5 horas, fue estupendo ponernos al día. Nos hicimos muy amigas, podíamos hablar de cualquier cosa”, contó a Mirror.
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La amistad fue dando rápidamente paso al amor. Pero no fue fácil. Había 25 años de diferencia entre ellas. “Siempre me he sentido atraída por personas mayores, así que la diferencia de edad no era un problema para mí, pero a Michelle le preocupaba”
“La gente siempre pregunta si ella es mi mamá. Trato de dejarlo pasar, pero duele. La edad no nos importa, entonces, ¿por qué les importa a otras personas?”.
Mónica y Michelle decidieron vivir su amor a pesar de todo. Ambas eran madres, tuvieron hijos en sus relaciones anteriores. Ahora están casadas, ambas son activistas LGTB y muy visibles en sus redes sociales.
